miércoles, 20 de enero de 2010

"MaCHu PiCChU"
















...y por fin llegó el momento...






Después de darnos un madrugón imortante y con la marutxi medio coja, decidimos que lo mejor era cambiar nuestros planes y subir en bus hasta la ciudad Inca. Además, el tiempo estaba muy lluvioso por lo que hubiera incrementado la dificultad y claro tampoco estamos aquí para sufrir más de la cuenta. Subir andando consistía en caminar 2 horas subiendo, peldaño trás peldaño, una empinada escalinata llamada la escalera Inca.

Nuestra idea era poder ver amanecer en la cima pero como os contamos el clima era fatal y cuando llegamos arriba estaba todo cubierto de nubes ¿lo llegaríamos a ver? ¿quién sabe?

Otro plan frustrado fue no poder subir al Huayna Picchu, la montaña que como os decíamos aparece en todas las fotos y desde la que tienes que tener una perspectiva diferente a la habitual. A esta montaña sólo suben al día 400 personas y claro debes estar allí de los primeros y con tu estado de forma en plenas facultades. De todas formas, ya nos habían dado otras opciones para poder disfrutar de buenas vistas sin tener que hacer esta subida, y eso fue lo que hicimos!!

A media mañana la cosa empezó a clarear y por fín pudimos ver Machu Picchu en todo su esplendor, qué pasada!! ahora sólo faltaba que hubiera menos turistas y así hacerlo aún más encantador pero esto de momento tendría que esperar.

Creeemos que las ruinas son espectaculares pero sin duda alguna el contexto es lo que hace que todo sea aún más grandioso ¿cómo podian haber construido aquello en esa época, en ese lugar y con los medios existentes?

Las primeras dos horas las pasamos con un guía para que hiciera nuestra visita más provechosa y así poder recoger detalles que de otra forma se nos escaparían. La verdad es que mereció la pena pagar una minima cantidad por tanta información.
Tras esto, el día era para nosotros enterito, para deleitarnos con la ocasión única de la que estabamos disfrutando.

Almorzando entre las ruinas tuvimos vistas impresionantes y estuvimos acompañados por unos animalitos llamados chinchillas, un roedor tipo conejo pero con orejas cortas y el rabo muy largo y peludo, muy gracioso.

Una vez cogidas fuerzas nos dirigimos hacia la Puerta del Sol, pero no la madrileña, je, je,... sino la inca. Esta puerta se encuentra a 45 minutos andando desde la ciudad y parece ser que cuando amanece, el sol aparece justamente a través de la puerta, siempre y cuando estés ubicado en la ciudad. Desde allí pudimos contemplar una vista maravillosa de la ciudad perdida de los Incas, las montañas colindantes, la subida desde Aguas calientes y su carretera en zig zag y el rio Urubamba, UN ORGASMO!!

Tuvimos suerte y la lluvia nos respeto para poder ver todo esto pero a la bajada otra vez empeoró la lluvia y nos calamos un poquito. Pero no nos quitó las ganas de seguir con la visita y nos dirijimos hacia el Puente Inca, éste esta enclavado en un pared vertical de roca con una caida vertiginosa, de hecho hace unos años un turista intrépido lo cruzó, se cayó, se mató y lo cerraron al paso del público desde entonces.

A la vuelta de esto, y para nuestra sorpresa, el publico había desaparecido y quedó Machu Picchu enterito para nosotros y pocos más. Fue entonces cuando pudimos saborearlo de veras. Realmente las sensaciones son sobrecogedoras, te sientes tan pequeñit@ entre tanta inmensidad... Recomendable por siempre!!
Lo demás que es mucho queda para nosotros... y no es posible aunque quisiéramos expresarlo con palabras, hay que sentirlo.

Hasta la próxima!!


1 comentario:

  1. Sin palabras las fotos de Machu/Huaynapichu, jeje que todavia no tengo claro cual es el que tiene la ciudad-palacio esa en la cumbre y cual el que se ve al fondo... un abrazo

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